Fenrir – El lobo de la mitología nórdica
Fenrir, es una de las criaturas de la mitología nórdica más importantes en la historia. Este lobo de enorme tamaño y ferocidad, es hijo del dios Loki y la gigante Angerboda. Su familia está profundamente entrelazada con las profecías apocalípticas conocidas como el Ragnarök, haciendo de Fenrir una figura central en estos relatos.
El origen de Fenrir
Toda historia tiene un principio, y en esta nos encontramos con uno de los hijos de Loki.
Además de Fenrir (o Fenris), nacieron dos hijos más de esta unión, Hel, la diosa del Infierno y la serpiente Jörmundgander. Todos ellos fueron desterrados por los dioses de Asgard cuando descubrieron su existencia. Hel fue enviada al reino de las tinieblas y Jörmundgander al fondo del mar donde por su tamaño, era capaz de cubrir toda la tierra y enroscarse en ella.
Pero Fenrir solo era un cachorro así que los dioses decidieron mantenerlo cerca y vivió con los dioses aunque solo el dios de la guerra Tyr era capaz de acercarse a él y darle de comer.
Preocupados por su rápido crecimiento los dioses trataron de encadenarlo pero fallaron por dos veces así que solicitaron ayuda a los mejores herreros, los Alfes negros. Estos fabricaron la cadena llamada Gleipnir. Pese a ello no fue tan fácil encadenar a Fenrir, pues este no era fácil de engañar así que utilizaron su bravura en su contra apostando contra él a que no sería capaz de liberarse de la nueva cadena con la que le iban a apresar, a lo que este acepto con desconfianza y solo si uno de los dioses colocaba su mano entre sus mandíbulas como garantía de no existir ningún tipo de truco de por medio.
Las cadenas cumplieron su propósito y el dios que tuvo la mala suerte de sufrir las consecuencias no fue otro que Tyr, que perdió su mano en las mandíbulas del lobo Fenrir.
Por si esto fuera poco, atravesaron con una espada sus mandíbulas y estas quedaron unidas para que el fiero lobo tampoco pudiera aullar y no fuera un peligro para nadie. Pero nada más lejos de lo que esperaban, pues estos hechos se cobrarán un alto precio más adelante.
Fenrir se tomará su revancha en el profetizado Ragnarok, donde junto con sus hijos (o hermanos dependiendo la versión) Hati, el lobo que perseguía la Luna y Sköll quien hacía lo propio con el Sol serán grandes protagonistas del final de los días de los dioses en el mundo, y del comienzo de la nueva era.
Los hermanos de Fenrir
Jörmungandr (la Serpiente de Midgard)
Hermano de Fenrir, Jörmungandr fue lanzado al océano que rodea Midgard (el mundo de los humanos) por los dioses, temerosos de su tamaño y poder. La serpiente creció tanto que rodea el mundo entero, mordiéndose la cola. Durante el Ragnarök, Jörmungandr se enfrentará a Thor, en un combate que resultará en la muerte de ambos. Este vínculo profético entre los hermanos refuerza su papel como agentes del caos y la destrucción.
Hel
La hermana de Fenrir fue asignada por los dioses para gobernar el reino de los muertos, Helheim. Este es el lugar donde las almas que no mueren heroicamente en batalla son enviadas. Hel, aunque no participa directamente en el Ragnarök como sus hermanos, es un símbolo del equilibrio entre la vida y la muerte en la cosmovisión nórdica.
Fenrir – El asesino de Odin
Fenrir se convertirá en el Ragnarok uno de los personajes más importantes que participan pues será quien dará muerte al Dios Odin. El poema Völuspá, narra a modo de profecía los hechos que ocurrirán durante la vida de los dioses de la mitología nórdica, hasta su final. Y en él, la profeta o völva, predice cual será el final del rey de los dioses:
Entonces se cumple
la segunda condena de Hlín,
cuando Odin va a luchar con el Lobo,
el asesino de Beli,
brillante, contra Surtr.
Entonces caerá
El dulce compañero de Frigg.
Durante el Ragnarok, Hati alcanzará la luna y la destrozará, por su parte Sköll terminará con la vida de Sol. Estos hechos producirán que la oscuridad se apodere de la tierra, mientras la guerra entre Odin y los dioses de Asgard contra Loki y los Jotuns tiene lugar. Sin embargo al propio Fenrir, la profecia le está reservado uno de los grandes momentos dentro del final de los dioses pues será él quien dará muerte a Odin devorándolo, aunque Viðarr (Vidar), hijo de Odín y dios del silencio, la venganza y la justicia vengará su muerte dando muerte a este y rescatando a su padre de las mandíbulas del lobo.
En esta gran batalla del Ragnarok, también conocida como la batalla del fin del mundo de la mitología nórdica, prácticamente todos los dioses, gigantes, monstruos y el propio universo serán destruidos.
El simbolísmo de Fenrir
Fenrir no solo es una figura aterradora en los mitos nórdicos, sino también un símbolo profundo que refleja aspectos clave de la cosmovisión escandinava antigua.
Fenrir representa las fuerzas indomables de la naturaleza que, aunque pueden ser contenidas temporalmente, son inevitables en su liberación. Su creciente tamaño, inhabilidad para ser controlado por las cadenas ordinarias y su destino de matar a Odín subrayan esta cualidad. Fenrir se convierte en una metáfora de los desafíos incontrolables que enfrentaban las comunidades nórdicas, como los inviernos largos y los desastres naturales.
Además, en la mitología nórdica, Fenrir está vinculado al destino y a la inevitabilidad de los eventos. A pesar de los esfuerzos de los dioses por mantenerlo contenido, las profecías aseguran su liberación y su papel en la destrucción del mundo. Esto refleja una visión fatalista del universo, donde incluso los dioses están sujetos al destino.
Aún quedan muchas historias y personajes que conocer de esta mitología que se irán descubriendo poco a poco, donde hay las más increíbles criaturas nacidas de la unión de algún dios con otro ser, ya sea humano, gigante o incluso animal.
Sendas del Viento. Historias y personajes que pudiste oír, pero nunca llegaste a escuchar.